fui infiel. hace un tiempo, estaba en pareja y apareció ella como por arte del destino, si el destino tiene algún rincón artístico por improvisado o por digitado.
hoy no estoy con ninguna de las dos mujeres de aquel momento y razonaba por qué había sido infiel. qué me había llevado a hacerlo y recordé uno de mis pensamientos de aquel momento. pensé en la muerte. bah, en realidad en el poco tiempo de vida que tiene uno. en los minutos que estaba pasando al lado de una sola persona como una pérdida de tiempo ¡en los minutos de bañarme como una pérdida de tiempo! y finalmente aquella idea de la muerte me llevó a pensar que sí, que el despunte del vicio sexual con aquella señorita de piernas lechosas era válido.
ya no me hago más preguntas sobre la infidelidad. ahora razono que si extremizara tanto mis conjeturas para ir a buscar un nuevo empleo o para ordenar mi nidito de rencor sería un gran sujeto.
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